Morante, es solo oir esa palabra y a cualquier aficionado a los toros se le llenaría el pecho de gusto, rabia torera y faenas de un valor artistico insuperable. Pues bien asi se llamaba el gallo de los hermanos Alonso. Gallo que les despertaba a eso de las 8, para ocuparse de cuidar y tratar como reinas a las mulillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario